Un emocionado Roger Federer se despidió del tenis profesional después de formar equipo con su gran compañero Rafael Nadal en una emotiva noche en la Laver Cup. El jugador de 41 años recibió una larga ovación después de salir de la cancha por última vez cuando se retiró como profesional.
El suizo, que ganó 20 títulos individuales de Grand Slam, es considerado uno de los mejores jugadores de la historia del tenis. “Ha sido un día maravilloso. Estoy feliz, no triste. Se siente genial estar aquí. Estoy feliz de haberlo superado”, dijo.
Federer lloró mientras abrazaba a Nadal y a otros jugadores, luego recibió elogios de los miles de fanáticos que corearon su nombre en el O2 Arena de Londres, el pasado viernes 23 de septiembre.
Nadal tampoco pudo contener las lágrimas. El español de 36 años lloró mientras se sentaba junto a Federer mientras la pareja escuchaba a la cantante británica Ellie Goulding, quien completó una noche memorable con una actuación.
Federer y Nadal, durante mucho tiempo rivales en la cima del juego masculino, unieron fuerzas para jugar dobles contra la pareja estadounidense Jack Sock y Frances Tiafoe en el evento anual por equipos entre Europa y el resto del mundo.
A pesar de que Federer no había jugado de manera competitiva durante más de un año, el dúo veterano empujó a Sock y Tiafoe antes de perder 4-6 7-6 (7-2) 11-9 cuando Team World empató 2-2 al final del juego en el día de apertura.
Federer y Nadal, apodado cariñosamente “Fedal”, casi lo ganan. La pareja tuvo un punto de partido en 9-8 en el decisivo, pero Federer solo pudo lanzar un golpe de derecha que empujó a la red. La derrota puso fin a la carrera profesional de 25 años del ex número uno del mundo después de su partido competitivo número 1.750 entre individuales y dobles.
“Ha sido el viaje perfecto. Lo haría todo de nuevo”, dijo Federer mientras trataba de contener las lágrimas durante su discurso en la cancha.
La carrera de Federer había estado en declive durante mucho tiempo, después de haber luchado contra una lesión en la rodilla durante los últimos dos años y necesitado tres operaciones para superar el problema. No había jugado un partido oficial desde que perdió ante el polaco Hubert Hurkacz en los cuartos de final de Wimbledon el año pasado.
A pesar de estar restringido a solo tres de los 11 Grand Slams organizados desde principios de 2020, esperaba que en julio aún pudiera regresar a los torneos principales. Pero, después de que un escáner trajera más malas noticias, Federer anunció la semana pasada que se retiraría porque “últimamente el mensaje de su cuerpo ha sido claro”.
Federer había hablado de organizar una fiesta para celebrar su último partido y dijo que quería que la ocasión fuera divertida y no fúnebre. Como él deseaba, hubo un ambiente de celebración en el estadio con capacidad para 17.500 personas.