El pasado sábado 3 de septiembre se llevó a cabo uno de los dos conciertos tributo a Taylor Hawkins, baterista de Foo Fighters, quien falleciera en marzo pasado en medio de una gira por Sudamérica. El tributo en el estadio de Wembley de Londres reunió a un sinfín de reconocidos músicos, entre ellos Paul McCartney, Brian May, Lars Ulrich, Liam Gallagher y muchísimos más.
Tanto los críticos especializados así como los fans catalogan a este tributo como uno de los momentos más emotivos y catárticos del rock del 2022. El cartel de artistas reunió a algunos de los mejores amigos, mayores influencias y compañeros del difunto baterista de Foo Fighters, en un show que duró seis horas.
Los propios Foo Fighters ofrecieron un set increíble en el que se les unieron varios bateristas diferentes. Entre ellos estaban Josh Freese, Travis Barker, Nandi Bushell, Rufus Taylor y Shane Hawkins, el hijo de 16 años de Taylor. Si eso no fuera suficiente, Paul McCartney también hizo una aparición sorpresa.
Precediendo al set de los Foo Fighters hubo una alineación estelar de artistas que incluía a Queen, Rush’s Geddy Lee y Alex Lifeson, Stewart Copeland, Brian Johnson, Lars Ulrich, Mark Ronson, Violet Grohl, The James Gang, The Pretenders, Them Crooked Vultures, Supergrass y más.
Como estaba previsto, un segundo show se dará en Los Ángeles, California el próximo 27 de septiembre, con un cartel similar y algunas variaciones, como por ejemplo estarán presentes Miley Cyrus, Brad Wilk de Rage Against The Machine, Joan Jett, Alanis Morissette, P!nk y muchos más.
Mirá a Shane Hawkins, el hijo de Taylor Hawkins, interpretar en vivo «My Hero» con Foo Fighters: