El cambio en los términos de uso de WhatsApp -que permite a Facebook recopilar datos- no sentó bien a los usuarios y se generó una migración masiva hacia otras aplicaciones de similar naturaleza.
Entre los datos que WhatsApp puede recopilar se encuentran los relacionados con el servicio (sobre cómo se interactúa con otros cuando se utiliza la aplicación y la dirección IP), así como datos relacionados con la cuenta, el nombre, número de teléfono o el dispositivo en el que se utiliza la aplicación.
Si sos de los que con esta variación prefiere pasarse a otra aplicación de mensajería instantánea, estas son algunas de las opciones más recurridas.
Telegram
Telegram es la gran alternativa y competencia directa de WhatsApp. Esta aplicación de mensajería instantánea permite, entre otras cosas, que las conversaciones sean secretas, que haya mensajes auto-eliminables, que se puedan transferir archivos de todo tipo y tamaño y que haya canales que permitan conocer comunidades de casi cualquier temática.
Signal
Creada en 2015 por Matthew Rosenfeld, Signal tiene el protocolo -considerado- como el cifrado más potente del momento en el mundo de la mensajería. Se trata de una app cuyo código está disponible en GitHub tanto en versión móvil (iOS y Android) como en versión de escritorio. Como peculiaridad, la aplicación tiene un PIN que se asocia automáticamente a nuestro usuario y que será usado para cifrar absolutamente todas las transacciones de datos con la app.
Line
No tiene mucho éxito aún en Occidente, pero sí en Asia. Es muy segura, ya que no se necesita un número de teléfono o un mail para comunicarse con otros.
Viber
En Viber, las comunicaciones están protegidas por un cifrado de extremo a extremo como opción predeterminada. Nada de lo que se comparte por los usuarios se conserva en los servidores de Viber una vez enviado, asegura la web de la aplicación. Además, la compañía asegura que no puede leer los chats, ni escuchar las conversaciones.
Wire
De nuevo, el problema de Wire es que no es una aplicación muy popular, como le pasa por ejemplo a Line. Está financiada por el cofundador de Skype, Janus Friis, y en su intercambio de archivos, llamadas y videollamadas también utiliza un cifrado de extremo a extremo, por lo que es una aplicación segura. No obstante, deberás primero convencer a tus conocidos para que se la descarguen y poder usarla.