Después de más de dos décadas conquistando los escenarios de Broadway y el West End, Wicked finalmente da el salto a la gran pantalla en una ambiciosa adaptación cinematográfica. Protagonizada por Cynthia Erivo y Ariana Grande, esta versión nos sumerge nuevamente en el mundo mágico de El Mago de Oz, pero desde una perspectiva completamente diferente: la historia es contada a través de los ojos de Elphaba, la temida y malinterpretada Bruja Mala del Oeste.
La historia de Wicked comenzó en 1995 con la novela Wicked: Memorias de una bruja mala, escrita por Gregory Maguire. Inspirado por su interés en los cuentos de hadas y las historias no contadas de los villanos, Maguire quiso explorar el origen del mal. Para ello, tomó como referencia el clásico literario El Maravilloso Mago de Oz de L. Frank Baum (1900) y su icónica adaptación cinematográfica de 1939, protagonizada por Judy Garland.
Uno de los aspectos más fascinantes de la novela de Maguire es cómo reinterpreta el personaje de la Bruja Mala del Oeste. En su versión, Elphaba Thropp nace con la piel verde y desde pequeña sufre el rechazo de la sociedad. A medida que crece, se da cuenta de que el mundo de Oz está marcado por la corrupción y la opresión, lo que la lleva a convertirse en una luchadora contra el régimen tiránico del Mago de Oz.
Aunque la novela tiene un tono más oscuro y aborda temas políticos y filosóficos profundos, la historia fue adaptada en 2003 a un musical de Broadway más accesible para el público familiar. Con canciones compuestas por Stephen Schwartz (El Príncipe de Egipto), la puesta en escena de Wicked se convirtió rápidamente en un fenómeno global, con producciones en múltiples países y un impacto cultural que ha perdurado hasta hoy.
Bajo la dirección de Jon M. Chu (In The Heights, Crazy Rich Asians), la adaptación cinematográfica de Wicked, ganadora de dos premios de la Academia y nominada a varias categorías, captura la magia y el esplendor del musical. En esta versión, veremos cómo Elphaba (Cynthia Erivo) y Glinda (Ariana Grande) pasan de ser rivales en la Universidad de Shiz a formar una compleja amistad que desafía las expectativas impuestas por la sociedad de Oz. Con efectos visuales deslumbrantes, un vestuario desbordante de fantasía y una banda sonora inolvidable, Wicked llega con la intención de marcar una nueva generación de espectadores.
Más allá de su impresionante puesta en escena, Wicked es una historia que invita a la reflexión. Plantea preguntas sobre el bien y el mal, la percepción de la sociedad y cómo los prejuicios pueden transformar a una persona. La relación entre Elphaba y Glinda simboliza los contrastes de la vida y nos recuerda que las etiquetas no siempre definen quiénes somos.
La película promete mantener la esencia del musical, combinando momentos de alegría y espectáculo con una historia emotiva y llena de significado. Y lo mejor de todo es que, si aún no la viste, podés alquilar Wicked: La historia secreta de las brujas de Oz en Flow y disfrutar de esta increíble aventura desde la comodidad de tu hogar.