En miras a la conmemoración del Día del Trabajador (1 de mayo), te traemos tres charlas TEDx sobre manejo del estrés, productividad, salud y emociones.
El día del trabajador se instituyó como el “Día Internacional del Trabajador” en conmemoración de la represión que sufrieron las obreras de la fábrica McCormick, durante varios días de abril y mayo de 1886, en la ciudad de Chicago, Estados Unidos.
En esas épocas, la jornada del trabajador estadounidense se podía extender hasta las 18 horas. En la ciudad de Chicago, la “Noble Orden de los Caballeros del Trabajo” agrupaba a la mayor parte de los asalariados y llevaba adelante una intensa campaña para lograr que la jornada laboral se limitará a las 8 hs. Este reclamo no cayó bien a la oposición empresarial, circunstancia que impulsó a los obreros de Chicago a declarar la huelga.
Para conmemorar la emblemática fecha te traemos algunas charlas inspiracionales que reflexionan sobre ciertas cuestiones ligadas al esfuerzo laboral.
Tips para manejar el estrés – Kelly McGonigal
El estrés es uno de los síntomas más comunes dentro del sector laboral y una de las epidemias que más se repite en el siglo XXI. La Organización Mundial de la Salud la ha incluido dentro de uno de los síntomas que más lleva a consultar a pacientes.
La psicóloga Kelly McGonigal en su charla de Ted insta a ver el estrés de una forma más positiva, incluso a amigarnos con esta sensación a través de prácticas que harán más llevadero nuestro día a día laboral.
Productividad y las emociones – Shawn Achor
Achor centra sus conocimientos en psicología positiva ¿cómo afecta el desarrollo del trabajo y la productividad nuestras emociones?
A través de anécdotas personales, con una cuota de humor, Shawn nos cuenta en apenas 12 minutos su teoría sobre la felicidad y la productividad, además de dar técnicas para mapear el desempeño.
Dentro de la mente de un procrastinador – Tim Urban
Tim Urban es un célebre blogger e ilustrador. Durante su conferencia para TED, Urban reflexiona sobre el porqué las personas retrasan de manera constante sus tareas, proyectos u obligaciones.
Con un tono jocoso, va citando ejemplos de situaciones cotidianas donde optamos por procrastinar, también menciona su fórmula para manejar el orden de las tareas.