Las fiestas de fin de año son un sinónimo de celebración con la familia y amigos, si bien este año será un poco diferente a causa de la pandemia, las tradiciones se mantienen intactas. Una de ellas es el clericó, la bebida típica de Navidad y Año Nuevo.
El clericó es básicamente un cocktail que conjuga un mix de frutas de estación con alguna bebida alcohólica, que va desde vino tinto, vino blanco, algún espumante o sidra. Algunos no le agregan alcohol así todos pueden disfrutarlo. Las frutas pueden ser naranja, manzana, banana, uva, y piña; otros le agregan también melón y ciruela, pero básicamente uno puede utilizar las frutas que más le agraden. Las frutas deben ser cortadas en trocitos, agregarles azúcar, y la bebida alcohólica de elección. También se le puede agregar jugo de naranja o limón.
En Paraguay es muy tradicional prepararla en kambuchi (cántaro de barro), recipiente que hará que el frío se mantenga por más tiempo, o bien en una jarra u otro recipiente de vidrio, para luego servirla en vaso y disfrutarla con una cuchara.
