El veterano Floyd Mayweather no quiso exigirse a fondo al enfrentar al youtuber Logan Paul. El campeón invicto dejó que el show desarrolle los ocho asaltos que tenía pactado, aunque controlando el trámite en todo momento.
El evento tuvo lugar la noche del domingo último en el Hard Rock Stadium, en Miami Gardens (Florida). La exhibición fue programada con ocho episodios de tres minutos. Mayweather (44) y Paul Logan (26) usaron guantes de 10 onzas y no hubo jueces ni lectura oficial del ganador.
La Comisión de Boxeo del Estado de Florida no sancionó la pelea, debido a la gran disparidad en tamaño y nivel de experiencia, aunque proporcionó a Samuel Burgos como árbitro.
Mayweather no quiso vapulear a Paul pero, como era de esperarse, lo dominó durante los ocho episodios. El boxeador profesional 50-0 no tuvo problemas para superar las desventajas de altura y peso y buscó estar siempre en la distancia correcta.
Paul aterrizó algunos golpes fuertes en Mayweather, pero claramente era imposible que superara a quien fuera clasificado como uno de los mejores en el boxeo.
Mayweather conectó 43 golpes en total contra 27 de Paul. De esos 43 golpes de Mayweather, 36 fueron de poder. Paul conectó 21 de poder. Mayweather conectó 17 al cuerpo en comparación con un solo golpe al cuerpo de Paul.
El espectáculo, que no figurará en los récords profesionales de ninguno de los dos, fue promovida por Mayweather Promotions.
Mayweather había declarado a TMZ que sus ganancias para este espectáculo serían de entre 50 millones a 100 millones de dólares, dependiendo de los ingresos a través del sistema “pay per view”. Se especula que Paul habría ganado dos millones de dólares.
Los organizadores de la exhibición están previendo montar otra pelea, esta vez entre Mayweather y el hermano de Paul, Jake Logan, en caso de que éste derrote al ex campeón welter de la UFC, Tyron Woodleym el próximo 28 de agosto.
En las mismas declaraciones a TMZ, Mayweather dijo que “para mí, es una situación en la que todos ganan, pero estoy en una situación sin salida porque si lo noqueo rápido en el primer asalto, van a decir: ‘Ah, esto no valió la pena’”.
Mayweather se enfrentó en el 2017 al ex campeón de la UFC, Conor McGregor, una exhibición que también levantó fuertes críticas de la rama más conservadora del boxeo.