Desde que Tim Berners-Lee gestó la idea de la WWW han pasado 30 años, de los cuales gran parte las hemos disfrutado por medio de mails, chats, redes sociales y otros servicios que caló en el día a día nuestro. Pasaron tres décadas y hoy tenemos todo para celebrar.
Imaginemos que toda la información almacenada en ordenadores en todas partes estuviera vinculada, que incluso se pudiera programar en un ordenador para crear un espacio en el que todo pudiera estar vinculado a todo, así nace la idea según el propio Berners-Lee y eso es hoy la base del internet actual.
No confundamos la WWW con Internet, que lleva 50 años entre nosotros. Internet es la infraestructura gigante que hace posible las conexiones, la WWW es la cara visible. Es lo que facilita que usaemos servicios como los navegadores, que sin ellos todo sería más complicado.
Es una tecnología que hace nuestro disfrute más sencillo. Hace que nos conectemos a ciertos servidores sin contar con un cable. Imaginemos que para conectar con Facebook tendríamos que tener un cable que llegue a los servidores de la empresa, es decir a EE.UU. o alguno en Europa. Esa es la magia de la WWW.
Así que festejemos no solo la tecnología de la WWW, sino lo que nos trajo, las amistades, los momentos, esos juegos, las descargas, la música, los videos, etc. Festejemos la WWW.